Qué bien llora esta familia
SEMANA 1 DE RODAJE
Rescatando a Sara es una miniserie muy emotiva. Toca un tema muy delicado como es el secuestro de una niña pequeña por parte de su padre. La madre, interpretada por Carmen Machi, tarda un año en conseguir hablar con ella y durante ese tiempo no sabe si está viva o está muerta. Sara había sido llevada, con engaños, por su padre a Iraq en plena guerra en el año 2006. Las emociones estén a flor de piel en la madre, por supuesto en la hija, pero también en el resto de personajes que rodean a la familia. Incluso en el padre, Abdel (interpretado por Hwidar).
La primera semana ha estado centrada en la casa familiar de Sara y Leticia en la Sierra de Madrid. Rodamos allí 5 días. En la historia, la familia vive en un chalet típico de la sierra, agradable, con una piscina… Sara es feliz en ese ambiente, es una niña mimada. De un día para otro se encuentra secuestrada en mitad de Basora, y arrebatada de las manos de su madre. Esa zona del guión es complicada, difícil, toca sentimientos profundos. Había que buscar un equilibrio en esas emociones para no ser excesivamente melodramático. Pero la verdad, es que había que llorar en muchas ocasiones, tanto la niña que hace de Sara, (Sandra Melero), como Carmen Machi, pero también la chica que hace de hermana mayor, Claudia Traisac o la abuela, Selica Torcal. Era un reto complicado.
La conclusión tras esta semana de rodaje ha sido muy clara, esta familia llora muy bien. En algún momento me costó decir corten porque la emoción que trasmitían los actores nos llegaba hasta la zona de monitores donde veíamos la escena. Hubo una secuencia en la que Cristian Amores, el responsable del sonido, puso una música en directo mientras la niña, tiempo después, volvía a la que había sido su habitación. Más de uno tuvo que quitarse los cascos para poder seguir trabajando porque las lágrimas les dificultaban la visión.
Y es que ya digo, esta familia llora muy bien.